Durante un incendio forestal, pueden caer miles de brasas sobre su techo y acumularse al costado
de su casa como granizo durante una tormenta. Si estas brasas se alojan en algo fácilmente
inflamable, ya sea en alguna parte de su casa o cerca de ella, su casa estará en peligro de
incendiarse. Las brasas que entran en contacto con material inflamable son la razón principal por
la que las casas se destruyen durante los incendios forestales.
Los materiales comunes que se convierten en brasas durante los incendios forestales incluyen
piñas de pino, ramas, corteza de árbol y tejas de madera. Según la intensidad del fuego, la
velocidad del viento y el tamaño de los materiales que se están quemando, las brasas pueden
transportarse a más de una milla de distancia del fuego. En consecuencia, incluso las casas
ubicadas a muchas cuadras del origen del incendio, son vulnerables a incendiarse y a la
destrucción total.
Si el propietario de una casa está consciente del peligro de las brasas y toma las medidas
necesarias con anticipación, se puede reducir sustancialmente la amenaza que representan las
brasas. Su hogar PUEDE sobrevivir cuando lleguen las brasas a su casa.