Un cultivo de cobertura es la siembra entre rotaciones de cultivo, de pastos, granos pequeños, leguminosas, o la mezcla de los tres, principalmente con el propósito de cubrir el suelo.
Los cultivos de cobertura generalmente se plantan después de la cosecha de un cultivo principal temprano para mejorar la salud del suelo, ya que reducen la erosión y las pérdidas causadas por la escorrentía, previenen la incursión de mala hierba y mejoran la fertilidad del suelo. También se usan para alimentar el ganado y para el forraje.
Se sabe que los cultivos de cobertura agregan materia orgánica a los suelos ya que ésta se reincorpora a la tierra, o gracias a la descomposición de la masa radicular de estos cultivos. Por lo tanto, puede ayudar a los productores a mantener una productividad a largo plazo. Los suelos nativos de Nevada tienen menos del 1 por ciento de materia orgánica, es decir tienen una estructura de suelo deficiente y con menor capacidad de retención de agua y nutrientes. Así es que, para mejorar la calidad de los suelos, los agricultores deben concentrarse en aumentar el contenido de materia orgánica a los suelos.
Una forma de mejorar la materia orgánica en los suelos es incluyendo cultivos decobertura en las rotaciones de cultivos. Laselección de una especie de cultivo de cobertura depende del momento de la siembra y de su uso. Hay muchas especies de cultivos de cobertura que se pueden incluir en la rotación de cultivos. Los cultivos de cobertura se pueden dividir en dos categorías principales, dependiendo de su capacidad para fijar nitrógeno (leguminosas) o no (no leguminosas). Sin embargo, la siembra de una combinación de dos o más especies de cultivos de cobertura es de gran beneficio para un establecimiento temprano y un mejor crecimiento de los mismos. Por lo tanto, los cultivos de cobertura desempeñan un papel importante en los sistemas agrícolas sostenibles. Esta publicación resume los beneficios principales de la siembra de cultivos de cobertura.
Beneficios de los cultivos de cobertura
Protección del suelo
Los cultivos de cobertura proporcionan una excelente cubierta del suelo mientras no esté siendo utilizado para el cultivo principal. Esta cubierta del suelo lo protegerá de las pérdidas por erosión eólica e hídrica (viento y agua). La erosión del suelo a través de estas fuerzas causa la pérdida de partículas, tales como arcilla y materia orgánica, las cuales son muy importantes para mantener la fertilidad del suelo. Los suelos de Nevada son susceptibles a las pérdidas por erosión eólica resultando en una pérdida significativa de partículas que son arrastradas lejos del campo por el viento. Por lo tanto, mantener el suelo cubierto por la siembra de cultivos de cobertura cuando no está creciendo ningún cultivo principal, ayudará a proteger la pérdida de suelo a través de la erosión eólica y así mejorará la fertilidad del suelo.
Adición de materia orgánica y nutrientes al suelo
El carbono (C) juega un papel muy importante en el mantenimiento de la salud general de los suelos agrícolas. La incorporación de cultivos de cobertura a los suelos ayuda a aumentar la materia orgánica (MO) del suelo, mejorando así la capacidad de retención de agua y nutrientes en los suelos. Comúnmente, la materia orgánica se calcula a partir del carbono orgánico utilizando un factor de conversión de 1.72, por ejemplo:
MO (%) = C orgánico total (%) x 1.72
Tanto el carbono del suelo como el nitrógeno (N) son necesarios para formar materia orgánica en los suelos. Las gramíneas (Figura 1) agregan más carbono a los suelos que las semillas leguminosas, debido a una mayor relación carbono-nitrógeno (C:N). Por otro lado, los cultivos de cobertura con una relación C:N más alta (>35:1) se descomponen y liberan nutrientes más lentamente que los cultivos con una relación C:N más baja, como las legumbres (guisantes, lentejas, caupí, soya, tréboles, etc. Además de la relación C:N, el proceso de descomposición y liberación de nutrientes también depende de la etapa de crecimiento del cultivo y de la especie de cultivo (Tabla 1). Los residuos de cultivos más jóvenes e inmaduros se descomponen y liberan nutrientes más rápido que los residuos de cultivos maduros.
Los cultivos de cobertura de leguminosas también agregan nutrientes al suelo a través del proceso de fijación de nitrógeno. Los cultivos de leguminosas forman asociaciones simbióticas (relaciones entre dos organismos que interactúan) con bacterias llamadas rizobios, que ayudan a producir nitratos del nitrógeno atmosférico. Estos nitratos (una de las formas disponibles de nitrógeno) son absorbidos por el cultivo de leguminosas. El nitrógeno se incorpora al suelo y está disponible para el siguiente cultivo después de que la leguminosa muere. Los cultivos de cobertura de leguminosas pueden ayudar a aumentar el N del suelo al agregar alrededor de 50-200 libras de N por acre (dependiendo de la especie), reduciendo así el costo de producción del siguiente cultivo al ahorrar dinero en costos de fertilizantes sintéticos, costos de combustible para su transporte y costos de mano de obra para la aplicación de fertilizantes.
Presión de plaga
La infestación de plagas puede aumentar o disminuir con el uso de cultivos de cobertura. Se ha demostrado que los cultivos de cobertura reducen las poblaciones de algunas malas hierbas y algunos patógenos transmitidos por el suelo. Por ejemplo:
- Los cultivos anuales de cobertura de raigras y centeno reducen significativamente las poblaciones de nematodos del quiste de la soya.
- Los cultivos de brasicáceas reducen la presión de los nematodos en el suelo gracias al proceso de umigación del suelo (una práctica para controlar las plagas transmitidas por el suelo).
- Se ha demostrado que el uso de camelina de invierno como cultivo de cobertura después de la cosecha de remolacha azucarera, proporciona un excelente control del cáñamo acuático y verdolaga (Figura 2).
- Se ha demostrado que el centeno tiene efectos sofocantes y alelopáticos (inhibición de una planta u organismo por otro) sobre las malas hierbas durante un máximo de seis semanas.
Además de la eliminación de malas hierbas, la incorporación de cultivos de cobertura también puede aumentar los beneficios económicos al reducir la necesidad de aplicar pesticidas.
Salud del suelo
Los cultivos de cobertura pueden mejorar significativamente las propiedades del suelo. La incorporación de cultivos de cobertura mejora la infiltración de agua y la aireación del suelo, reduciendo así la formación de costras superficiales y la compactación del suelo (densidad del suelo). El uso de cultivos de cobertura mejora la formación y estabilidad de los agregados del suelo, aumenta la biomasa microbiana y la actividad enzimática en los suelos. La diversidad microbiana del suelo también se mejora mediante la siembra de cultivos de cobertura en las rotaciones de cultivos.
Alimentar el ganado con pasto o forraje
Los cultivos de cobertura generalmente se plantan en el otoño, después de la cosecha del cultivo principal. Estos cultivos de cobertura se mueren o se incorporan de nuevo al suelo en la primavera, antes de plantar el siguiente cultivo principal. Sin embargo, los cultivos de cobertura tales como centeno de invierno, triticale, trigo, etc. se pueden usar para alimentar el ganado o se pueden cosechar antes de plantar el siguiente cultivo. Esto ayudará a aumentar el área de terreno de pasto entre las temporadas de cultivo principales. Además, la alimentación rotacional del ganado con estos cultivos de cobertura ayudará a aumentar la utilización del campo y al mismo tiempo disminuye la compactación del suelo.
Conclusiones
La integración de los cultivos de cobertura en las rotaciones de cultivos puede ser de gran beneficio para mejorar los suelos. Sin embargo, antes de su adopción a gran escala, hay que considerar lo siguiente: la selección de especies o variedades, el costo de las semillas y el tiempo de duración del cultivo de cobertura, Además, la sequía o la falta de disponibilidad de agua pueden ser un inconveniente para implementar cualquier sistema de cultivo de cobertura en regiones más secas como Nevada.
